Con motivo del Día Mundial del cáncer de piel, desde Centro Guna queremos ofreceros esta información, a tener en cuenta y que os pueden interesar.
El cáncer de piel es el crecimiento descontrolado de células anómalas de la piel, debido a un daño en el ADN de dichas células, la causa principal es la radiación ultravioleta procedente del sol, y de las camas de bronceado. Los daños que provoca el sol en nuestra piel, son inicialmente invisibles, pero repetidos a lo largo del tiempo, pueden llegar a producir un cáncer en la piel, por eso decimos que “ la piel tiene memoria” y es tan importante la protección desde los primeros años de vida.
Hay determinados factores que aumentan el riesgo de padecer un cáncer de piel, y aquellas personas que cumplan uno o varios de estos factores deben extremar las precauciones:
-Ojos, piel y cabellos claros.
-Antecedentes en la familia de cualquier tipo de cáncer de piel, o personas con numerosos lunares.
– Quemaduras solares, sobretodo en la infancia o adolescencia.
¿Que medidas debemos tomar para podernos exponer al sol de forma responsable?
- No tomar el sol entre las 11:00 y las 16:00.
- Utilizar siempre crema protectora con un índice apropiado para nuestra piel, más alto cuanto más factores de riesgo tengamos, y que cubra tanto los UVB como los UVA, ya que unos son los responsables de las quemaduras solares, pero los otros penetran más, y son los responsables del daño en el corazón de la célula (ADN).
- Repetir la aplicación cada 2-3 horas y después del baño, aunque el protector marque resistencia al agua.
- Secarse después del baño, evita las quemaduras y manchas, por el efecto lupa que generan las gotas de agua en la piel.
- Cubrirse con ropa protectora si se va a estar mucho tiempo expuesto al sol.
- Extremar las medidas cuando estemos en lugares donde la luz se refleje (mar, nieve, desierto… )
- Vigilar la medicación que se pueda estar tomando, ya que muchos fármacos, son fotosensibles, y aumentan el efecto del sol en nuestra piel, pudiendo provocar quemaduras más fácilmente.
- NO exponer nunca al sol directo a niños menores de 6 meses, y los menores de 3 años deben exponerse con protecciones muy altas. NO obstante tener especial cuidado con los niños y adolescentes porque son los más vulnerables ante loa rayos solares.
Por último, hay que tener en cuenta que algunos tipos de cáncer de piel, por ser muy limitados, se pueden curar pero otros como el melanoma pueden llegar a ser mortales por su rápida diseminación, por ello es fundamental poder detectarlos precozmente.
El melanoma se está convirtiendo en un problema importante ya que está aumentando muy rápidamente y se suele dar con mayor frecuencia en gente joven.
En los varones suele aparecer en el tronco o la región de la cabeza o el cuello, mientras que en las mujeres suele aparecer en brazos o piernas.
Al ser un tumor que se asemeja a un lunar o que aparece en un lunar ya existente, es importante que controlemos todos nuestro lunares; os damos unas pautas para poder hacerlo, se trata de la regla del A B C D E
A: Asimetría: Que el lunar no tenga forma redondeada u ovalada.
B: Bordes irregulares: Bordes desiguales. Irregulares, borrosos o con picos.
C: Color: Lunar con varios colores; los colores más peligrosos son los rojizos, blanquecinos y azulados sobre lesiones de color negro.
D: Diámetro: Cuando el lunar mide más de 6 milímetros.
E: Evolución: Cuando un lunar cambia en poco tiempo de color , tamaño, forma o, sangra repetidas veces.
Tras la autoexploración, es importante consultar al dermatólogo cuando se observen cambios en un lunar.